Una vez visto cual es el formato mas aconsejable a utilizar cuando realizamos una captura fotográfica con una cámara digital, es el momento de hablar de como debemos realizar dicha captura. A la hora de medir la luz que diferencias debemos tener en cuenta entre el sistema tradicional (carrete o analógica) y la fotografía digital.
La diferencia básica es que mientras en la fotografía clásica se exponía midiendo hacia las sombras, en la fotografía digital se expone para las luces.
La razón de esto es que mientras que en la fotografía tradicional, la película funciona de manera similar a como lo hace el ojo humano, trabajando de forma no lineal (cada diafragma deja pasar el doble de luz que el siguiente), los sensores digitales tienen una respuesta completamente lineal: únicamente cuentan fotones y generan a partir de ellos una señal eléctrica directamente proporcional al impulso lumínico.
La consecuencia de esa linealidad, mientras que el diafragma de la cámara deja pasar el doble de luz que el que le sigue (eso no ha cambiado), es que la información de la captura se almacena principalmente en los niveles más brillantes.
Esta retahíla que puede parecer muy complicada, lo vamos a entender mas facilmente si prestamos atención a esto mismo pero dicho de otra manera.
Si el sensor de nuestra cámara es capaz de captar seis diafragmas distintos con nivel de detalle, el primero (para una cámara normal de 12 bits) capta 2.048 niveles de información, el siguiente 1.024, el siguiente sólo 512 y así sucesivamente, hasta el punto que el último diafragma captado sólo recoge 64 niveles.
En conclusión esto significa básicamente que en la fotografía digital captada por los sensores, ya sean CCD o CMOS hay mucha más información en las luces que en las sombras.
Por eso la mejor manera de exponer en digital, sobre todo en escenas de bajo/medio contraste, se hace midiendo puntualmente a las luces más altas en las que queremos conservar detalle (descartando reflejos especulares y brillos) y sobreexponiendo entre 1,5 y 2 EV a partir de esa medición, para obtener un histograma desplazado a la derecha hasta el punto de casi reventar las luces altas pero sin llegar a hacerlo.
En esta foto tomé la media en la espuma de las olas que era
donde quería que se conservara el detalle y subí 1,5 el diafragma.
donde quería que se conservara el detalle y subí 1,5 el diafragma.
Esto es lo que se llama comúnmente "derecheo del histograma". Y desde luego es conveniente disparar en formato RAW para que cuando lo “revelemos” en nuestro PC llevemos el histograma a su sitio.
Con ello recogemos la máxima información captada en todas las zonas del sensor sin obtener por ello un aumento del ruido y un empastamiento de las zonas de sombra. Logrando así una fotografía con mayor riqueza de colores y con muchos mas mátices.
Este es un error en el que se suele incurrir sobre todo si acabas de pasarte de la fotografía analógica a la digital puesto que cuando se hacía la fotografía con la película negativa (y a veces también en la diapositiva) se recurría a menudo a subexponer para obtener mayor saturación y colores más vivos, pero exponer de ese modo en digital daría lugar a pérdidas de información y sobre todo a la aparición de ruido y empastamiento de las sombras.
Mientras en la fotografía clásica la tendencia lógica era subexponer teniendo en cuenta las sombras, en la fotografía digital la norma es sobreexponer teniendo en cuenta las luces altas.
Este es además otro motivo mas para disparar en RAW ya que nos permitirá usar esta técnica del derecheo del histograma. Sin embargo si disparamos en JPG no tiene mucho sentido derechear el histograma porque no se pueden recuperar los mismos niveles que en RAW.
Esto es así porque el JPG trabaja con muchísimos menos niveles (8 bits contra los 12-16 del RAW).
¿Debemos derechear el histograma si queremos hacer una foto en JPG?
Si optamos por dispara en JPG el modo de exposición debe ser normal, sin derecheo, aunque cambia con respecto a la fotografía convencional que sigue siendo preferible una ligera sobreexposición a una subexposición; las sombras se siguen empastando y aparece el ruido al levantarlas.
En JPG hay que disparar previendo no tener que editar... para editar el RAW es muy superior, mientras que con el JPG tener que editarlo ya supone sumar pérdidas a su nivel de calidad inferior.
En conclusión
1.- Si disparamos en RAW debemos medir en la zona de luces altas que queremos conservar detalle y subir en tre 1´5 y 2 diafragmas para conseguir la máxima información disponible.
2.- Si disparamos en JPG debemos medir en la zona de luces altas que queramos conservar detalle y ajustar el diafragma.